POR QUÉ EL FERROCARRIL:

El ferrocarril como medio de transporte, la mejor apuesta para el siglo XXI

Por vía terrestre es el medio más rápido, cómodo y seguro:

Con las modernas infraestructuras y la introducción de nuevas tecnologías, es el medio de transporte más rápido y seguro por vía terrestre.
La gran amplitud de sus vehículos les permite una gran capacidad de especialización (coches camas, coches restaurante o cafetería, coches salón, portaequipajes, etc.), y gran libertad de movimientos al viajero.
Por todo ello y dado que la vía férrea no admite cambios bruscos de nivel ni curvas muy cerradas, los viajes en tren son muy confortables en comparación con otros medios de transporte por vía terrestre.

Es el más económico:

Por el aprovechamiento de la energía: una sola cabeza tractora es capaz de transportar mucho pasaje o mucha carga de una vez. Un solo tren de mercancías puede transportar una carga equivalente a 20 camiones de gran tonelaje.
Es el medio más idóneo para la intermodalidad: una gran cantidad de mercancía llega a su destino puntualmente y de una sóla vez para ser transferida a otros medios de transporte para su distribución final.
Por la gran cantidad de puestos de trabajo estables, directos e indirectos que su expansión genera allí donde está implantado.

Su impacto medioambiental es mínimo:

Una línea férrea de doble vía, con una enorme capacidad de tráfico, ocupa la misma anchura que una carretera secundaria.
El ferrocarril actual utiliza energía eléctrica, con emisión nula de contaminantes a su paso.

La mejor alternativa:

Por los inconvenientes derivados del crecimiento desmesurado de carreteras y autopistas, la saturación del tráfico, y el fuerte impacto medioambiental, su utilización está siendo recomendada por distintas organizaciones internacionales como la Unión Europea.