CINCO DÍAS

El contrato programa de la Compañía española Renfe con el Estado será firmado este otoño y prevé que a finales del próximo ejercicio se inicie el traspaso desde la operadora ferroviaria al GIF de las infraestructuras de red, del servicio de circulación y del personal correspondiente. El modelo elegido implica el traspaso gradual de los 13.000 kilómetros de red ferroviaria de Renfe y de los 12.000 trabajadores de las unidades de negocio de infraestructura y circulación.
De hecho, además del traspaso de vías al GIF, Renfe ha procedido a asignar a cada unidad de negocio operadora, con el fin de que afloren todos los costes de la explotación del servicio y no se distorsione la futura competencia con los nuevos operadores. Una vez divididas las vías, Renfe tiene previsto segregarse en las dos empresas, una operadora y otra denominada Renfe Desarrollo, encargada de los negocios colaterales (telecomunicaciones, espacios comerciales, …), encargada de aportar fondos para inversiones a la Renfe matriz.