A BARCELONA EN TREN: UN VIAJE PARA DISFRUTAR

El grupo de ASAFAL que tuvo la ocasión de viajar en tren a Barcelona entre los días 20 y 24 de junio pasado gozó del privilegio de subir a diferentes trenes desde la salida de Almería. Así, el viaje se inició en el regional 598 para llegar a Granada, comprobando en la cabina de conducción cómo funciona el sistema de basculación activa del automotor. El recorrido nocturno en el Tren Hotel Gibralfaro tiene esa gran ventaja de viajar mientras duermes para llegar a la ciudad Condal a primera hora de la mañana y aprovechar al máximo el tiempo. Así pues, sin perderlo y tras tomar las habitaciones de un excelente hotel en pleno ensanche barcelonés, un tren de Cercanías llevó el grupo desde Sants hasta Vilanova i la Geltrú para visitar el Museo del Ferrocarril y la gran rotonda de locomotoras Además de la exposición permanente, recientemente se había abierto una temporal sobre la historia de Talgo, en donde se podía contemplar numerosas maquetas a distintas escalas, documentos originales de la constructora, fotografías y paneles explicativos, destacando una magnífica reproducción a escala del Talgo I, el prototipo que dio lugar a las series posteriores.
El día siguiente se inició desde la estación de Sants para viajar en un tren regional (aunque con el logo de Cercanías) hasta Ribes de Freser, en la línea que llega hasta La Tour de Carol (Francia). En este punto parte el famoso y espectacular tren de cremallera que sube hasta Nuria, único medio mecanizado para acceder al valle.

A la ida una moderna unidad doble panorámica y al regreso una simple antigua. Las vistas durante el recorrido son sorprendentes y la llegada soberbia, ya que el acristalamiento de la cabina de conducción permite no perder detalle alguno, sobre todo, cuando entra en acción la cremallera. Una vez en el valle, se ofrecen múltiples actividades (senderismo, equitación, remo, etc.) y una exposición explica cómo se construyó este impresionante ferrocarril.

El tercer día estuvo dedicado a una visita en bus turístico por Barcelona, donde no podía faltar la subida en teleférico a Montjuich, la estación de Francia, el tranvía azul  y el funicular del Tibidabo, así como el tranvía de la Diagonal. Un viaje muy completo para recordar.